Como todos los años he asistido a
RetroBarcelona pero este año ha sido muy diferente, especial. Os cuento como
viví mi experiencia personal el sábado, que es el día que asistí.
Cuando llegué a la Fira de
Montjuïc aluciné como siempre con la cola. Esta se extendía desde Av. María
Cristina dando la vuelta a la esquina por Rius i Taulet y llegando
prácticamente a la calle Lleida. Impresionante. Podréis observar en las
fotos que el personal estaba jugando a cartas, os pueden dar una idea de la cola.